El objeto interestelar 3I/ATLAS ha captado la atención de la comunidad científica desde su descubrimiento. Este fenómeno ha suscitado inquietudes sobre su naturaleza, lo que ha llevado a especulaciones de que podría ser de origen alienígena. Los descubridores y analistas, incluyendo al destacado científico Avi Loeb de Harvard, están explorando las implicaciones de este objeto, que se mueve a velocidades impresionantes.
3I/ATLAS fue detectado por el telescopio ATLAS en Río Hurtado, Chile, aunque imágenes iniciales se habían obtenido desde mediados de junio. Su trayectoria inusual, que incluye un movimiento retrógrado, ha sido un punto focal en el debate sobre su origen. Al ser el tercer objeto interestelar identificado, se une a Oumuamua y 21/Borisov en la lista de visitantes de otros sistemas estelares.
A medida que 3I/ATLAS se aproxima, los científicos están realizando estudios detallados sobre su composición, conformando una visión más clara sobre si representa una “amenaza”.
Con sus características únicas, como no contar con una cola cometaria, 3I/ATLAS ha sido catalogado como un cometa. La NASA estima que su trayectoria lo llevará a acercarse a la órbita de Marte en octubre, pero asegura que no hay riesgo de colisión con la Tierra, a aproximadamente 240 millones de kilómetros de distancia en su punto más cercano.
Mientras la comunidad científica estudia sus órbitas y características, las teorías sobre su origen se multiplican. A pesar de la especulación de que podría ser una nave espacial extraterrestre, la mayoría de los expertos sostienen que es más plausible que se trate de un cometa expulsado de otro sistema estelar.