La IBERO Puebla, el Observatorio Ciudadano Comunitario del Agua y Medio Ambiente de los Valles Centrales de Oaxaca (OCCAMA) y ARTICLE 19 Oficina para México y Centroamérica inauguraron esta semana la Escuela de Escazú: Herramientas para la Aplicación Ciudadana y Comunitaria del Acuerdo de Escazú.
Más de 50 participantes de diferentes estados de México y de países como Chile, Perú y El Salvador se formarán en 15 sesiones de trabajo en torno a este tratado internacional pionero en la protección del medioambiente y de quienes lo defienden.
De acuerdo con Alas y Raíces, entre diciembre de 2018 y octubre de 2024 fueron asesinadas 225 personas defensoras en México, 94 de ellas por su labor en la defensa de la tierra, el territorio y un medioambiente sano. Estas cifras ubican a México como uno de los más peligrosos de la región para la defensa ambiental.
En un país con altos niveles de conflictividad socioambiental, megaproyectos de infraestructura y extractivismo, resulta urgente fortalecer la aplicación del Acuerdo de Escazú.
Este tratado establece obligaciones estatales en materia de acceso a la información, participación pública y justicia ambiental, y representa una herramienta clave para garantizar la seguridad y la voz de comunidades y personas defensoras en la toma de decisiones que afectan sus territorios y el medioambiente.
La Escuela de Escazú busca brindar herramientas prácticas y accesibles para aplicar el tratado en la defensa de los derechos ambientales, con un enfoque de derechos humanos, interculturalidad y género.
Las instancias que impulsan este espacio formativo consideran fundamental la sinergia entre defensores de la tierra y organizaciones de la sociedad civil y entidades académicas como condición necesaria para el cuidado de la casa común y la preservación de la vida.