El cierre del gobierno de Estados Unidos ya suma dos días y podría derivar en despidos masivos de empleados federales. La portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, adelantó que la cifra de trabajadores afectados podría ser de “miles”.
Leavitt responsabilizó a los demócratas por el bloqueo que impide aprobar una extensión presupuestaria para financiar a las agencias federales. “Esto no estarían ocurriendo si los demócratas hubieran votado para mantener abierto el gobierno”, señaló.
La administración del presidente Donald Trump ha diseñado planes para aprovechar el cierre y reducir significativamente el tamaño de la administración pública. La Oficina de Administración y Presupuesto informó que los despidos podrían comenzar en “dos días”.
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El conflicto presupuestario se centra en demandas encontradas: los demócratas exigen mayores recursos para la sanidad, mientras que los republicanos acusan que esos fondos serían para ampliar servicios a migrantes en situación irregular.
Mientras se mantiene la paralización, alrededor de 750 mil empleados federales no esenciales están suspendidos sin sueldo, y otros 1.5 millones siguen trabajando sin recibir pago hasta que se resuelva el impasse legislativo.
