El gobierno venezolano anunció un nuevo despliegue de fuerzas armadas en todo el país para enfrentar lo que definió como “amenazas imperiales” en un contexto de tensión con Estados Unidos.
El comunicado del Ministerio de Defensa indica movilización de unidades terrestres, aéreas, navales, fluviales y sistemas de misiles, además de la Milicia Bolivariana, con órdenes de máxima alerta y patrullaje en zonas costeras y fronterizas.
La medida se anunció como respuesta a maniobras y operaciones militares extranjeras en la región que Caracas considera hostiles, incluida la presencia naval estadounidense en el Caribe que ha elevado el tono de la confrontación diplomática.
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El gobierno presentó el despliegue como una acción preventiva para garantizar la defensa integral del territorio y la soberanía nacional.
Fuentes oficiales señalan que el operativo comenzó de madrugada y se trata de un ejercicio de despliegue rápido; por ahora no se han detallado todas las áreas específicas ni la duración total de las maniobras. En los próximos días las autoridades deberán informar si habrá ejercicios combinados, cambios en los niveles de alerta o nuevas órdenes operativas.
La comunidad internacional sigue de cerca la situación y la evolución dependerá tanto de la gestiones diplomáticas como de las decisiones militares en la región.
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