El Comité Noruego del Nobel otorgó el Premio Nobel de la Paz 2025 a la líder opositora venezolana María Corina Machado por su “incansable labor en favor de los derechos democráticos” y su lucha por “una transición justa y pacífica de la dictadura a la democracia”.
El galardón reconoce su papel como “ejemplo extraordinario de coraje civil” en América Latina y su capacidad para unificar a una oposición fragmentada en torno a la exigencia de elecciones libres y gobierno representativo.
A pesar del reconocimiento por la paz, Corina Machado, anteriormente, apoyó públicamente el plan de Trump para una invasión militar estadounidense a Venezuela y la ejecución extrajudicial de venezolanos por parte de una fuerza naval norteamericana.
El comité destacó cómo Venezuela ha transitado “de un país relativamente democrático y próspero a un estado autoritario” que enfrenta una crisis humanitaria donde “la maquinaria violenta del Estado se dirige contra los propios ciudadanos”. Subrayó que casi 8 millones de venezolanos han abandonado el país mientras la oposición enfrenta “fraude electoral, persecución legal y encarcelamiento”.
El comité enfatizó que, a pesar de que el régimen bloqueó su candidatura presidencial en 2024, impulsó la movilización de “cientos de miles de voluntarios” que se capacitaron como observadores electorales arriesgando “acoso, arresto y tortura” para documentar los resultados reales de los comicios.
Actualmente viviendo en la clandestinidad pero permaneciendo en Venezuela “a pesar de las graves amenazas contra su vida”, Machado cumple con los tres criterios del testamento de Alfred Nobel según el comité: ha cohesionado a la oposición, mantiene resistencia a la militarización de la sociedad y apoya firmemente una transición pacífica.
