Desde el domingo pasado, Francia está siendo azotada por una ola de violencia en la cual grupos vinculados al narcotráfico han incendiado vehículos de personas que ocupan cargos dentro del sistema penitenciario francés, así como disparos en contra de las entradas de las prisiones con fusiles Ak-47.
En palabras del ministro de justicia francés, Gérald Darmanin, estos ataques son intentos del crimen organizado por intimidar al estado y lograr que este se eche para atrás en la serie de medidas que pretende implementar para establecer un régimen más estricto dentro las prisiones y evitar que narcotraficantes puedan seguir operando dentro de las rejas.
“Lo hacen porque estamos tomando medidas contra la permisividad que ha existido hasta ahora en las cárceles”, declaró Darmanin.
Junto a los ataques perpetrados, los delincuentes se han encargado de dejar las siglas “DDPF”, las cuales hacen referencia al acrónimo por la Defensa de los Derechos de los Prisioneros Franceses y a un grupo en redes sociales que ha difundido videos para generar pánico, como grabar a un guardia saliendo de su automóvil y su nombre inscrito en un buzón.
El último ataque por parte de este grupo se habría dado este miércoles 16 de abril en la prisión de Tarascón en la cual incendiaron tres automóviles. Junto con este incidente, ya serían seis prisiones en total las que han sufrido la ola de violencia desde el domingo.
Antes esta situación, el gobierno francés ha dejado el asunto en manos de la Fiscalía Nacional Antiterrorista (PNAT), debido a que, según Darmanin, estos son actos de terror. Dicho esto, el gobierno del país europeo ha expresado su confianza en que las investigaciones den resultados y se pueda acabar pronto con este tipo de incidentes.
Editor: Jesús Israel Villalobos Fernández
