Este domingo 18 de agosto, el colectivo Madres Buscadoras de Sonora, localizó un crematorio clandestino en las inmediaciones de la Comaya, en el municipio de Nogales, Sonora; el cual aún se encontraba en uso al momento del hallazgo.
A través de sus redes sociales, la líder del colectivo y activista, Ceci Flores, informó que por medio de un llamado anónimo, y con el apoyo del colectivo Buscadoras de la Frontera Nogales y de las autoridades locales, pudieron encontrar un pozo que funcionaba como un crematorio clandestino, localizado en un predio enmontado de camino a La Comaya, en donde anteriormente se han realizado múltiples hallazgos de fosas clandestinas.
“Lamentablemente doloroso para las madres que tienen hijos desaparecidos aquí, estar mirando esto y estar oliendo este aroma a carne quemada, todavía está ardiendo el pozo y están manchas de sangre, esto lo pueden corroborar, que aquí hay personas que echaron recientemente y se miran las brazas abajo”, detalló la activista en un video compartido en redes sociales.
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En el video se puede observar un horno de piedra en el suelo, el cual podría tener al menos tres metros de profundidad, según lo comenta la activista. Sin embargo, se desconoce el número de personas que podría haber sido calcinadas en el crematorio, por lo que las autoridades serán las encargadas de indagar en el caso.
“Ya nos había tocado una vez en Guaymas llegar a donde se estaban quemando unos cuerpos y no poder hacer nada, es lo peor, que no podemos hacer nada ante este hallazgo terrible; la magnitud a lo que puede llegar la mente humana, desaparecer completamente a las personas de esta manera”, puntualizó en otra publicación en su cuenta X.
Además del video, Flores agregó la fotografía de un cuerpo en el lugar en el que todavía se apreciaban las prendas que portaba: un pantalón de mezclilla color negro y una playera tipo polo; y otra imagen de gotas de sangre en el piso.
Por redacción
Editora: Diana González
