El gobierno de Estados Unidos acaba de avalar una nueva norma que bloquea políticas generales que impedía que los estudiantes transgénero utilicen baños escolares que se alineen con su identidad de género, lo que podría crear un conflicto con las leyes de los estados controlados por los republicanos.
El choque sobre la política de baños y otros elementos de una regulación federal finalizada la semana pasada podría sentar las bases para otra ola de batallas legales sobre cómo se debe tratar a los niños transgénero en Estados Unidos.
En los últimos años, las personas transgénero han ganado visibilidad y aceptación en Estados Unidos, y algunos funcionarios conservadores se han opuesto.
La mayoría de los estados controlados por el Partido Republicano ahora tienen leyes que controlan sus derechos.
Las medidas incluyen leyes para mantener a las niñas transgénero fuera de los deportes escolares femeninos, limitar qué baños escolares pueden usar las personas transgénero, exigir al personal de la escuela que notifique a los padres si su estudiante se identifica en la escuela como transgénero y prohibir que el personal de la escuela deba utilizar los pronombres transgénero.






