El funcionamiento del Ayuntamiento de Chignahuapan podría verse comprometido debido al presunto daño patrimonial por 86 millones de pesos que heredó la administración del exedil, Francisco Javier Tirado Saavedra.
Así lo reveló el alcalde de Chignahuapan, Lorenzo Rivera Nava, quien aceptó que el gobierno municipal cuenta con deuda pública y juicios laborales pendientes por resolver, por lo que podrían verse en aprietos económicos en caso de que los cobros prosperen.
“Sin duda que tenemos pasivos, tenemos temas por cobrase hacia el Ayuntamiento, en términos de juicios laborales. Hasta el momento no lo están comprometiendo, pero si se llegan los cobros, pueden comprometer la operatividad”, comentó.
Durante su visita al Congreso del Estado este miércoles, confirmó que su antecesor habría incurrido en aparentes irregularidades financieras en el periodo 2018-2021, por lo que ya analiza la posibilidad de interponer denuncias penales.
Indicó que, entre las anomalías que fueron detectadas en 29 obras públicas, dos corresponden a edificaciones que no han sido encontradas, a pesar de que están reportadas como terminadas y pagadas, relacionadas con trabajos de la red de agua potable y drenaje.
Además, Rivera Nava precisó que la obra con más irregularidades es la construcción de la Casa de Justicia de Chignahuapan, misma que implicó un gasto de 31.6 millones de pesos, pero no fue ejecutada en su totalidad.
Por lo anterior, el alcalde confirmó que su administración extenderá la denuncia ante la Auditoría Superior de la Federación (ASF) para que se investigue y determine lo procedente.
Por Vera Fernández
Editor: Iván Betancourt
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