La Arquidiócesis de Puebla concluyó este lunes la Visita Pastoral realizada del 20 de julio al 11 de agosto en la Zona Norte, con sede en la parroquia de Nuestra Señora de la Asunción, en Tlatlauquitepec. Este recorrido, enmarcado en el mandato canónico de los obispos, buscó fortalecer la comunión eclesial, reanimar la labor evangelizadora y promover la renovación de la vida cristiana entre los fieles.
El arzobispo Víctor Sánchez Espinosa, acompañado por los obispos auxiliares Francisco Javier Martínez Castillo y Tomás López Durán, lideró esta misión en la que participaron sacerdotes del Pontificio Seminario Palafoxiano, seminaristas, religiosas, catequistas y laicos. Juntos visitaron las 46 parroquias y comunidades que integran los seis decanatos de la región: Ahuacatlán, Cuetzalan, Tlatlauquitepec, Zacapoaxtla, Zacatlán y Zapotitlán.
La Arquidiócesis de Puebla está dividida en seis zonas pastorales: Norte, Sur, Oriente, Poniente, Centro y Urbana.
Durante tres semanas, se llevaron a cabo actividades de acompañamiento espiritual, formación y animación misionera, destacando la importancia de la fe como eje de la identidad cultural de los pueblos.
La clausura se centró en un sentido de gratitud por el legado histórico y religioso de la región, donde la fe ha moldeado el arte, la música, las tradiciones y la vida comunitaria durante más de cinco siglos. Con esta visita, la Iglesia busca profundizar la inculturación de la fe, enriqueciendo su misión con las expresiones propias de cada comunidad.
En total, la iniciativa reunió a más de 800 participantes, incluyendo a 24 sacerdotes misioneros, 58 párrocos de la zona, 200 seminaristas, 50 religiosas y 500 catequistas, quienes trabajaron para fortalecer los lazos de unidad y fe en la diversidad de la Zona Pastoral Norte.
