Un caso de negligencia médica ha conmocionado a la República Checa luego de que una mujer de 88 años, declarada muerta por una médico forense, “despertara” dentro de su ataúd en una funeraria. El hecho, ocurrido el pasado viernes en la localidad de Pilsen, ha llevado a una investigación penal contra la profesional, quien podría enfrentar hasta tres años de prisión.
El incidente comenzó cuando la pareja de la anciana llamó al servicio de emergencias al no poder despertarla por la mañana. Siguiendo el protocolo para casos de defunción, los equipos de socorro derivaron el caso a una empresa forense privada. Sin embargo, la empleada a cargo certificó la muerte sin realizar un examen clínico adecuado, lo que permitió que el cuerpo fuera trasladado a una funeraria.
Ya dentro del ataúd, la mujer abrió los ojos, dejando atónitos a los trabajadores del lugar. La octogenaria fue llevada de inmediato a un hospital, donde se confirmó que solo presentaba síntomas propios de su edad avanzada.
Tras el incidente, la empresa forense despidió a la empleada involucrada, quien ahora enfrenta una investigación por negligencia profesional. Según la policía checa, si se comprueba su responsabilidad, podría recibir una condena de hasta tres años de prisión.
Autoridades checas afirmaron que revisarán los procedimientos para evitar errores similares, mientras el diario Pravo, que dio a conocer la noticia, destacó la importancia de exámenes médicos rigurosos antes de declarar un deceso.
