La Ceiba en Francisco Z. Mena, así como Totomoxtla y Llano Grande, en Honey, son las comunidades de Puebla que permanecen incomunicadas debido a los efectos de las lluvias, que dejaron en la entidad un saldo de 22 muertos y 2 desaparecidos.
Durante la Mañanera del Pueblo, en Palacio Nacional, el secretario de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), Jesús Antonio Esteva Medina, informó que se ha restablecido el paso en 29 de las 32 localidades que se encontraban incomunicadas en el estado, logrando la liberación de 43 caminos.
Indicó que se mantienen trabajando 72 máquinas y 182 trabajadores distribuidos en 33 frentes en zonas como el Puente Tlaxcalantongo, Xaltepec y el camino Naupa-Xolotla.
Detalló que, de los 19 puentes afectados en Puebla, seis ya cuentan con paso provisional, mientras que el resto está siendo evaluado por proyectistas y técnicos, quienes ya trabajan en los proyectos ejecutivos para su reconstrucción.
En su intervención, el gobernador Alejandro Armenta explicó que una de las localidades incomunicadas es La Ceiba en Francisco Z. Mena, que –dijo– siempre ha sido afectada por la crecida del río Pantepec, para lo cual se está planeando una solución, y comentó que el sábado visitará dicha comunidad.
Mientras que en Honey siguen incomunicadas Totomoxtla y Llano Grande, debido a una precipitación extraordinaria que se registró hace cuatro días.
Te puede interesar: Sheinbaum vuelve a Xicotepec; supervisa entrega de apoyos a damnificados
Sigue búsqueda de dos personas
Asimismo, agradeció a la presidenta Claudia Sheinbaum el apoyo y su presencia en la zona de desastre, pues consideró que ello ha permitido lograr que exista un avance significativo en la atención de los daños y damnificados.
También informó que el número de personas fallecidas, hasta el momento, es de 22; pero aún falta encontrar a dos personas con reporte de “no localizadas”.
Destacó que los equipos de búsqueda de la Marina, Defensa Nacional y Guardia Nacional se mantienen activos para hallar a Liam Tadeo González Lechuga, un niño de 6 años de edad originario de Huauchinango, y a Pedro Segura Muñoz, de 75 años, de Tetela de Ocampo.
Editor: César A. García






