La FIFA abrió un procedimiento disciplinario contra Gustavo Cabral, defensor del club Pachuca, tras un incidente de supuesto racismo ocurrido durante el partido contra el Real Madrid en el Mundial de Clubes.
El incidente tuvo lugar el pasado 22 de junio en Charlotte, donde se disputaba un encuentro del grupo H del Mundial de Clubes. La denuncia proviene de Antonio Rudiger, quien acusó a Cabral de insultos racistas. A pesar de las acusaciones, Cabral ha negado tales insultos.
La FIFA, a través de su Comité de Disciplina, tomó esta decisión tras una evaluación de los informes del partido. Aunque las medidas específicas aún no se han determinado, la atención mediática y pública se ha centrado en la gravedad del acto denunciado.
Xabi Alonso, entrenador del Real Madrid, expresó su apoyo a Rudiger y dejó claro que el club no tolerará ninguna forma de racismo. “Vamos a ver, se activará el protocolo FIFA y van a investigar. Si ha sucedido, apoyamos a Antonio; es algo inaceptable“.
El defensa argentino, desmintió haber dicho insultos racistas contra el central alemán. La controversia estalló en los minutos finales del encuentro cuando Rüdiger acusó a Cabral de dirigirle expresiones discriminatorias, lo que llevó al árbitro a intervenir con un gesto asociado al protocolo contra el racismo. Sin embargo, el defensor argentino aseguró que solo usó una frase común en su país: “Cagón de mierda”.
“Fue una discusión. El árbitro hizo la señal de racismo, pero no hubo nada. Es una palabra que decimos mucho en Argentina. Todo el tiempo le repetí lo mismo”, explicó Cabral a los medios. El futbolista insistió en que las imágenes demostrarían que sus palabras fueron malinterpretadas.
