La Fiscalía General del Estado informó que se comprobó que los restos humanos hallados en una casa pertenecían a Neri, la menor reportada como desaparecida el 2 de noviembre del año pasado en San Martín Texmelucan.
De acuerdo con Alejandro García Badiola, fiscal especializado en delitos de Desaparición Forzada y cometida por particulares, la confronta genética arrojó que se trataba de la niña de 7 años, por lo que sus padres se mantienen en prisión preventiva por el delito de desaparición cometida por particulares.
García Badiola indicó que está por iniciar la etapa intermedia del proceso contra Yari N. y su esposo Ulises Manuel N, quienes mintieron a las autoridades sobre la desaparición de la menor al asegurar que la habían perdido de vista en un desfile de Día de Muertos.
Sin embargo, al investigar la desaparición, la FGE encontró que la menor no estaba con ellos desde tres meses atrás, encontraron restos óseos, así como a sus tres hermanos en condiciones deplorables en la vivienda junto a animales de compañía.
Los hermanos de Neri de 12, 13 y 14 años de edad están al resguardo del DIF, ya que una de ellas inclusive había sufrido varios abortos.
Los menores tenían meses sin bañarse ni comer, además que tenían problemas de lenguaje.
Los tres dijeron que sus padres les pidieron mentir sobre el día en el que vieron por última vez a Neri.
