El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha anunciado la implementación de un arancel del 30% a las importaciones provenientes de México y la Unión Europea, a partir del 1 de agosto. Esta medida fue comunicada en cartas dirigidas a los líderes de ambos socios comerciales y publicada en su red social Truth Social.
Marcelo Ebrard, secretario de Economía de México, respondió rápidamente, informando que el país ya ha establecido una mesa de negociaciones con Estados Unidos. Trump ha indicado que revisará esta tarifa si México toma medidas adicionales para combatir el narcotráfico, subrayando una preocupación persistente sobre la influencia de los cárteles en América del Norte.
La tarifa del 30% reemplazará el arancel de emergencia actual del 25% que se aplica a determinados productos mexicanos que no cumplen con el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC). Canadá también enfrentará un arancel del 35% a sus exportaciones, en un aparente ajuste a las represalias políticas entre ambos países.
Estos aranceles se fundamentan en la Ley de Poderes Económicos de Emergencia Internacional (IEEPA) bajo acusaciones de falta de cooperación de Canadá y México en temas de narcotráfico y migración. Ebrard señalado que las conversaciones están en marcha para mitigar el impacto de estos nuevos aranceles, destacando la importancia de la cooperación bilateral.
A medida que se acerque la fecha de implementación, tanto México como la Unión Europea buscarán formas de renegociar términos que podrían salvaguardar sus intereses comerciales. La situación está generando incertidumbre en las economías afectadas, ya que los aranceles tienden a incrementar los precios y afectar la inflación.
