Por Itzeli Zamora
Factores como el descontento laboral y la revalorización de la forma de vida provocaron que durante la pandemia de Covid-19 al menos el 2% de los colaboradores de empresas presentara su renuncia de manera voluntaria.
Así lo informó la directora del Observatorio de Competitividad y Nuevas Formas de Trabajo de UPAEP, Cynthia Montaudon Tomas, quién presentó un análisis piloto sobre el fenómeno denominado “La gran renuncia” ante el Trabajo Remoto en México durante la pandemia del Covid-19.
Indicó que de 208 participantes, el 36% renunciaría a su trabajo en caso de contar con recursos económicos, un 63% realizó búsquedas de empleo, 44% está insatisfecho con su empleo actual, 37% consideró que su empleador no ha actuado como debería durante la crisis sanitaria y 78% quiere un empleo flexible y decidir sus honorarios.
Refirió que esta situación se generó ante el aislamiento y la necesidad de encontrar un balance entre la salud personal y la vida laboral.
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Además que la pandemia de coronavirus permitió detectar los proyectos que pueden ser más flexibles para dar valor al tiempo en familia y comprender la fragilidad de la vida ante los cambios actuales.
No obstante, las mujeres son las que más han renunciado, pues tienen doble carga de trabajo al tener que realizar tareas en el hogar, adicional al desempeño laboral remoto.
Por ello consideró que los principales retos son mayor capacitación para que las personas realicen otras actividades; mientras que empresas deben identificar los factores de descontento, así como mejorar las condiciones salariales y apoyos psicológicos.
