El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, habría comunicado a su círculo cercano que Elon Musk dejaría su cargo como asesor en las próximas semanas, sin embargo, Karoline Leavitt, vocera de la Casa Blanca, lo negó: “esta “primicia” es basura.”
“Elon Musk y el presidente Trump han declarado públicamente que Elon dejará el servicio público como empleado especial del gobierno cuando complete su increíble trabajo en DOGE“, aseguró Leavitt.
La decisión de ambos empresarios estaría basada en un acuerdo, según el cual Musk regresará a la gestión de sus empresas, como Tesla y SpaceX, y asumirá un papel de apoyo más informal en la administración.
Actualmente, Musk lidera el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), implementando medidas de reducción de personal y recortes presupuestarios en diversas agencias federales. Estas acciones generaron controversia y protestas en Estados Unidos.
La salida de Musk coincide con desafíos para Tesla, que ha experimentado una disminución del 4% en las ventas de vehículos en el primer trimestre de 2025, su nivel más bajo en casi tres años. Esta caída se atribuye a interrupciones en la producción y a la reacción negativa del público hacia la participación política de Musk.
La posible salida de Musk ha generado un aumento en las acciones de Tesla, que subieron un 3.91% en la bolsa de Nueva York después de la publicación de la noticia.
Se espera que Musk mantenga un rol informal como asesor. La transición coincide con el fin del periodo de Musk como “empleado gubernamental especial”, que vence a finales de mayo o principios de junio.
