“No tengo favorito ni favorita” para la renovación de la presidencia del Consejo Coordinador Empresarial (CCE) de Puebla, manifestó el gobernador Miguel Barbosa Huerta, quien recalcó que en la entidad se acabaron los privilegios a los que estaban acostumbrados los líderes empresariales.
El mandatario dejó en claro que no tiene ninguna opinión favorable sobre la elección del nuevo presidente del CCE.
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Y es que, comentó, cuando inició su gestión en 2019, los integrantes del CCE “querían mandar” en la administración estatal, lo cual no permitió.
Cuestionado sobre si la renovación de la presidencia del CCE repararía la relación del organismo empresarial con el gobierno del Estado, Barbosa contestó que lo que deben hacer los representantes de la iniciativa privada es “portarse bien”.
Por ello, les recomendó pagar sus impuestos, sacar sus licencias de funcionamiento y regularizar las descargas residuales de sus empresas, pues reiteró que ya se acabaron los privilegios a los que estaban acostumbrados en sexenios anteriores.
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“No tengo favorito ni favorita, si yo apoyo a alguien le doy el beso del diablo. No, a mí que no me vega a ver nadie, no tengo opinión favorable sobre lo que se elija en ese lugar, de nadie así se los digo claramente para que no andemos a medias tintas. Llevo tres años, querían venir a mandar aquí, no chiquitos (…) pórtense bien”, declaró.
Por Alejandra Olivera
Editor: Iván Betancourt
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