Por Redacción
Max Verstappen fue el ganador del Gran Premio de la Ciudad de México y Lewis Hamilton le siguió, pero a nadie se le ovacionó tanto como a Sergio Pérez quien terminó en el tercer lugar y subió por fin al podio que tanto anhelaba.
Cuando ganó Sakhir la campaña anterior y Azerbaiyán en la actual, se notó su felicidad y lo emocionado que estaba por ver reflejados años de esfuerzo, pero ninguno le debe satisfacer tanto como el que obtuvo hoy en casa, ante su gente, con el Cielito Lindo que se escuchó de fondo antes de la arrancada y con las gradas tapizadas de verde, blanco y rojo.
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Ningún otro mexicano había estado tan cerca del podio corriendo en México como lo hizo Pedro Rodríguez en la edición de 1968 al quedase en cuarto lugar, pero Checo rompió con esta malaria, además ligó su tercer Gran Premio quedando entre los mejores tres lugares pues anteriormente subió al podio en Turquía y Estados Unidos, en ambos cruzó la meta en tercer sitio.
De igual maneta logró su podio número 15 en el Gran Circo. “Gracias chicos, gracias. Estoy muy feliz por mi país, vamos a festejar con tequila”, dijo a sus compañeros de equipo por el radio.
