Al menos una persona falleció en Estados Unidos debido a los tornados que azotaron el noreste de Oklahoma, mientras los meteorólogos alertan sobre la expansión de las tormentas hacia otros estados como Kansas, Misuri, Kentucky e Illinois.
Durante la noche, se reportaron al menos 16 tornados en Iowa, Nebraska, Kansas, Oklahoma, Tennessee y Dakota del Sur. Los más devastadores ocurrieron al norte de Tulsa, Oklahoma. La Oficina del Alguacil del Condado de Osage, ubicado a unos 235 kilómetros al noreste de Oklahoma City, confirmó la muerte de un residente en Barnsdall, donde varias personas resultaron heridas y numerosos edificios sufrieron daños.
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El tornado afectó una residencia para ancianos en Barnsdall, con unos mil habitantes, lo que obligó a trasladar a los pacientes a un albergue. Además, la Agencia de Gestión de Emergencias del condado de Craig reportó daños en cinco casas y el gimnasio de una escuela en Welch, mientras que el condado de Kingfisher registró daños en el techo de una casa en Lacey y en un establo en Hennessey.
El Servicio Meteorológico Nacional (NWS) advirtió un riesgo acentuado de tormentas fuertes este martes en partes del valle del río Ohio y el miércoles en el sur de las Planicies, el valle del Misisipi y los valles del Ohio y el Tennessee. El Centro de Pronóstico de Tormentas (SPC) amplió hasta el miércoles sus avisos de posibles tormentas muy fuertes en partes de Indiana, el oeste de Ohio y la región centro norte de Kentucky.
El frente de tormentas, resultado del encuentro entre aire frío desde el oeste y aire templado del Golfo de México, mantuvo en alerta a millones de residentes desde Dallas, Texas, hasta Dakota del Sur. Se prevé que el martes continúen las tormentas aisladas en el norte de Misuri, pero los meteorólogos anticipan otra ronda de tormentas fuertes con vientos dañinos, granizadas y tornados para el miércoles.
Por Redacción
Editora: Mafer Montes
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