Autoridades municipales y la cementera Cruz Azul convinieron una revisión jurídica para que se determine si en lo sucesivo el ayuntamiento de Tecamachalco debe recibir una parte proporcional de pagos de derechos por parte de la empresa.
Así lo manifestó el secretario de Gobernación estatal, Javier Aquino Limón, quien indicó que después de reunirse con los ediles involucrados y representantes de la compañía fueron retirados los sellos de clausura de la cementera, por lo que se encuentra trabajando con normalidad.
Explicó que las escrituras de la cementera señalan que el territorio donde se asentaron hace 20 años pertenece al municipio de Palmar de Bravo, de manera que durante ese tiempo ha realizado sus trámites y pagos en dicho ayuntamiento.
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Sin embargo, dijo que cuando Tecamachalco hizo una revisión de su superficie y dirimió el tema con Palmar de Bravo halló que una parte de la empresa se encuentra en su territorio, de ahí su exigencia de recibir el pago de impuestos y derechos, para lo cual están tramitando su interés jurídico; aunque evitó mencionar el monto que reclamado.
Aquino Limón descartó una invasión, pues insistió que la fracción que pertenece a Tecamachalco surgió de una delimitación territorial con Palmar.
Añadió que las partes están abiertas al diálogo, así como a una revisión jurídica sobre las escrituras de propiedad de la planta, por eso, anticipó que si se determina que ambos municipios tienen requerimiento de impuestos se tendrá que hacer con apego a la Ley.
Editor: Renato León Aranda
