En el penal de San Miguel se reestablecerá la tecnología en materia de seguridad que el personal y mandos “echaron a perder”, afirmó el gobernador Miguel Barbosa Huerta.
Tras el caso del bebé Tadeo, el mandatario señaló que se están haciendo los cambios necesarios para mejorar la seguridad al interior del penal, por lo que aseguró que los identificadores biométricos y cámaras que se instalaron para controlar los accesos del penal se repararán.
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Y es que, acusó, los responsables del reclusorio y mandos superiores, “desconfiguraron” la tecnología instalada en el reclusorio.
Al tiempo, subrayó que está firme la vinculación a proceso de Nadia Carolina N. y Jessica N. que están directamente involucradas en la introducción del cadáver del bebé Tadeo al penal, así como el de Antonio N., Gerardo N. y Sergio N. que también participaron en la “trama diabólica”.
Señaló que las autoridades seguirán indagando en el caso, por lo que consideró saldrán a la luz más irregularidades y por lo que seguirán atendiendo las consecuencias colaterales.
Por Alejandra Olivera
Editora: Brenda Balderas
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