El gobernador Miguel Barbosa Huerta reconoció que 2021 fue un año lento en la aplicación de recursos para la reconstrucción de inmuebles afectados por el sismo del 19 de septiembre de 2017.
Sin embargo, señaló que el gobierno federal asumió como prioridad concluir la reparación de daños y tiene voluntad para ello.
Aseguró que su administración ha invertido cantidades importantes en vivienda y que de los casi 700 monumentos históricos dañados, se ha atendido a penas la mitad.
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Sobre las quejas de ediles que reclaman la atención de iglesias, pues han pasado cuatro años dese el terremoto, indicó que el tema es de competencia de la Federación, pues el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) se encarga exclusivamente de su reparación mediante empresas que ellos definen y aprueban.
