De 2018 a 2025, el Partido Revolucionario Institucional (PRI) en Puebla perdió al 93.6 por ciento de sus militantes, con la permanencia de Néstor Camarillo Medina en la dirigencia estatal.
Actualmente, el padrón de afiliados carece de figuras políticas relevantes, con la desbandada de múltiples liderazgos en los últimos siete años.
De acuerdo con el padrón más reciente del PRI, con validez ante el Instituto Nacional Electoral (INE), en la entidad poblana cuentan con 40 mil 283 militantes activos.
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Lo anterior refleja una estrepitosa caída en sus afiliados, pues tan sólo en el 2018, antes de la llegada de Néstor Camarillo a la dirigencia, tenían 634 mil 281 militantes.
El partido perdió alrededor de 593 mil 998 afiliados de 2018 a 2025, lo que equivale a un promedio de 232 militantes diarios.
El padrón del PRI se desinfló durante el periodo en el que Camarillo Medina fungió como presidente del Comité Directivo Estatal (CDE), de 2019 a 2025.
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El senador, quien el pasado 25 de agosto renunció a su militancia para sumarse a Movimiento Ciudadano (MC), es el principal responsable de la debacle del tricolor.
A lo largo de su gestión -la cual compartió con Alejandro Moreno Cárdenas a nivel nacional- salieron del partido figuras políticas relevantes.
Entre ellos se encuentran excandidatos a la gubernatura como Alberto Jiménez Merino y Enrique Doger Guerrero.
También exdirigentes estatales, como Jorge Estefan Chidiac y Juan Manuel Vega Rayet; así como diputados locales y alcaldes.
Actualmente, el PRI mantiene en su militancia a pocos cuadros reconocidos a nivel local, como la familia Rivera Sosa y Rivera Nava de Chignahuapan.
Además, se mantiene la exsenadora, Lucero Saldaña; la diputada federal, Xitlalic Ceja García; y la legisladora local, Delfina Pozos Vergara.
Editor: Renato León
