Agentes de la policía de Israel atacaron la mezquita Al-Aqsa, la más grande de Jerusalén, en donde se reportaron 17 personas heridas y nueve detenciones.
El ataque del 17 de abril de 2022 se suma a los perpetuados por grupos extremistas en las últimas semanas donde coinciden las celebraciones más importantes para los cristianos, judíos y musulmanes desde hace 33 años.
De acuerdo con los registros médicos de la Media Luna Palestina, los 17 heridos recibieron primeros auxilios, aunque se reportó a cinco personas en observación clínica.
En redes sociales circularon videos en los que se observa a personal de la policía israelí someter a palestinos para desalojar el recinto sagrado, por lo que algunas personas han calificado el actuar de los agentes como abuso policial.
Nabil Abu Rdeneh, portavoz del presidente palestino Mahmud Abbas, calificó los actos como peligrosos.
“Es una peligrosa escalada, cuyas repercusiones deben ser asumidas únicamente por el gobierno israelí”, dijo el funcionario palestino.
Por su parte, el primer ministro de Israel, Naftali Bennett, mencionó que se evalúan el actuar de los agentes de defensa para aclarar los hechos y emitir las sanciones correspondientes, en caso de existir abuso policial.
“Estamos trabajando para calmar las cosas, por un lado, y estamos tomando medidas enérgicas contra los individuos violentos, por otro”, declaró Bennett.
Esta situación se suma al enfrentamiento del 15 de abril de 2022 en donde 152 palestinos y 3 agentes israelíes resultaron heridos durante las confrontaciones en la Explanada de las Mezquitas.
Por: Redacción
Editor: Alejandro Rojas
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