“Pensé en lanzarme desde el balcón con mis dos hijas”, dijo Nora García, una de las afectadas por la tromba atípica que cayó el viernes de la semana pasada en la colonia Francisco I. Madero de la ciudad de Puebla.
En entrevista con Oro Noticias, recordó los momentos de angustia que vivió junto con su familia que, como el resto de los vecinos del Fraccionamiento Los Álamos, no quieren volver a experimentar.
Eran las cuatro de la tarde del 24 de mayo, como todos los días, narró Nora, quien comía junto dos dos hijas cuando empezó a llover.
La mujer dijo recordar una caída de agua normal hasta que empezó a escuchar que estaba acompañada de granizo.
Sin embargo, abundó, su gran tamaño ya rayaba en lo atípico.
Con la mirada puesta en sus electrodomésticos inservibles que aún están regados en el primer piso de su vivienda, Nora dijo que el agua empezaba a filtrarse por su puerta, la cual en menos de cinco minutos se derrumbó.
Como pudo, tomó a sus dos hijas y subió las escaleras, donde los primeros cinco escalones ya estaban inundados.
En el segundo piso, en su terraza, recordó escuchar los gritos de sus vecinos que no daban crédito de lo que estaba ocurriendo.
Sin saber qué nivel alcanzaría el agua y como o no dejaba de llover, Nora pensó lanzarse desde el balcón hacia la gran capa de granizo que ya había “sepultado” los vehículos.
Su intención, recordó, era salvarse junto con sus hijas.
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Entre vecinos que también estaban la parte alta de sus casas, recordó que empezaron a tranquilizarse entre sí mientras les daban aviso a los números de emergencias.
Las redes sociales, dijo Nora, también jugaron un papel muy importante debido que el Ejército Mexicano, Bomberos y Protección Civil llegaron muy rápido.
La mujer recordó que los elementos literalmente los rescataron, pues a muchos de sus vecinos, como a ella, los sacaron cargando de sus casas hacia la parte de afuera del fraccionamiento.
Ayer continuaban las labores de limpieza por parte de las autoridades que, incansables, apoyan a las decenas de familia afectadas tanto del fraccionamiento Los Álamos, como de Santa Cecilia, la calle Benito Juárez y la Venustiano Carranza.
Los elementos de PC Estatal, Bomberos, del Ejercicio y la Guardia Nacional desinfectaron 42 cisternas y hasta ayer ya habían dotado a 20 de agua limpia.
Las calles permanecen con lodo y ramas que de a poco van retirando también las autoridades junto con los vecinos, quienes -dijeron- temen que otra lluvia les vuelva a hacer lo mismo.
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