El cónclave para elegir al sucesor del papa Francisco comenzó este miércoles en el Vaticano, cuando los 133 cardenales electores se encerraron en la Capilla Sixtina, mientras miles de fieles se congregan en la plaza de San Pedro esperando la primera fumata que indicará si se ha elegido a un nuevo pontífice.
Tras la orden del Maestro de Ceremonias, se cerraron las puertas de la Capilla Sixtina dando inicio formal al cónclave.
Previamente, los cardenales se reunieron en la Capilla Paulina para una oración inicial, y el cardenal Pietro Parolin, secretario de Estado y presidente del cónclave, recordó en latín a los purpurados su misión de elegir al 267º papa de la Iglesia Católica.
Posteriormente, en una procesión cargada de simbolismo, los cardenales atravesaron la Sala Regia hasta llegar a la Capilla Sixtina, donde entonaron el himno “Veni, Creator Spiritus” para invocar al Espíritu Santo.
Uno a uno, los cardenales juraron respetar la Constitución Apostólica “Universi Dominici Gregis” y guardar secreto sobre todo lo acontecido durante la elección.
La jornada comenzó en la mañana con la misa “Pro eligendo Pontifice” en la Basílica de San Pedro, oficiada por el cardenal decano Giovanni Battista Re, quien en su homilía pidió unidad y un papa que “despierte las conciencias” en estos tiempos complejos.
