Un maestro escolar halló en el jardín de su casa la pieza faltante del Boeing 737-9 Max de Alaska Airlines, que se desprendió en pleno vuelo el pasado 5 de enero.
La pieza faltante se trataba de un tapón de la puerta del fuselaje de la aeronave, el cual los investigadores lo consideran clave para determinar las causas de la despresurización.
La parte del fuselaje del Boeing 737-9 Max fue encontrada en el patio de una residencia en Portland, Oregón. La semana pasada una explosión provocó que se desprendiera una ventanilla y parte del fuselaje, y el avión se viera obligado a aterrizar de emergencia.
El maestro tomó dos fotografías de la pieza y las envió al correo electrónico que difundieron las autoridades a la ciudadanía para que los ayudaran a localizar la pieza faltante.
Además, las autoridades indicaron que se reportó que otras dos personas encontraron dos teléfonos celulares que se habrían caído del avión, que llevaba a bordo 171 pasajeros y seis tripulantes.
Desde el pasado 6 de enero, la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA, por sus siglas en inglés) ordenó la inmovilización temporal de todos los aviones Boeing 737-9 MAX operados en el país.
Por: Redacción
Editor: Guillermo Leal
