La Oficina Federal de Investigaciones (FBI) de Estados Unidos ha creado un grupo especial encargado de perseguir los ataques contra los vehículos de la marca Tesla y los concesionarios donde los venden.
El director adjunto de para los Asuntos Públicos del FBI, Ben Williamson, confirmó en su cuenta de X que ese grupo especial se creó conjuntamente con la Oficina de alcohol, tabaco y explosivos (ATF).
El pasado viernes, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, llamó “terroristas enfermos” a los que han quemado vehículos Tesla o han atacado concesionarios de la marca, señalando que “quizá podrían ir a las prisiones de El Salvador”.
En un comentario en la red social Truth, Trump dijo que “estoy impaciente por ver a los enfermos matones terroristas condenados a sentencias de prisión de 20 años por lo que están haciendo a Elon Musk y a Tesla”.
Los ataques han ido acompañados además de convocatorias en las redes a boicotear la compra de vehículos Tesla por el mismo motivo, proclamas que ha traspasado fronteras y que han provocado una notable caída en las ventas del fabricante.
La fiscal general de Estados Unidos, Pam Bondi, anunció el pasado jueves que ha presentado cargos contra tres personas acusadas de incendiar vehículos, concesionarios o estaciones de carga de Tesla y pidió una pena de entre cinco y 20 años de prisión para cada uno.
“Que esto sirva de advertencia: si te unes a esta ola de terrorismo doméstico contra las propiedades de Tesla, el Departamento de Justicia te pondrá entre rejas”, dijo Bondi entonces.
La semana pasada se registraron asaltos a concesionarios de Tesla en Las Vegas y Kansas City, por lo que el FBI está investigando estos hechos como posibles actos de terrorismo.
