Dinamarca y Suecia buscan prohibir los matrimonios entre primos hermanos, a partir de julio del 2026, en una acción que pretende replicar lo logrado por Noruega, que hace unos meses vetó este tipo de unión.
El ministro de Justicia sueco, Gunnar Strömmer, argumentó que los matrimonios entre primos, a menudo conllevan una restricción de la libertad individual.
“El contexto es que la violencia y la opresión relacionadas con el honor son un problema social importante. Demasiadas personas tienen restringido su espacio vital y sus libertades fundamentales debido a normas opresivas sobre el honor. Parte de ello se debe a los matrimonios entre primos” aseguró.
La vicepresidenta del Tribunal de Apelaciones de Svea, Anne Kuttenkeuler afirmó que “ los matrimonios entre primos a menudo son arreglados y que la decisión sobre esta unión recae principalmente en una familia o clan y no realmente en una elección individual”.
Lo anterior limitaría la libertad personal de las personas involucradas en este tipo de unión civil, según Kuttenkeuler.
Algunas estimaciones indican que entre 140 a 150 personas estarían casadas con sus primos hermano en Suecia. Sin embargo, las propias autoridades suecas desconfían de estas cifras, reconociendo que podría ser mayor.
Para algunos expertos, estas restricción no solo resguardaría a las mujeres, sino que además impulsaría al crecimiento social, así como ayudar a abolir diferentes tipos de estructuras patriarcales en algunas comunidades.
