Las autoridades de Nueva York descartaron que la explosión de un auto en el cruce fronterizo de Canadá y Estados Unidos, ocurrido el pasado 22 de noviembre, se tratase de un ataque terrorista.
El Buró Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés) informó que que no se identificaron materiales explosivos ni un vínculo con el terrorismo en la escena.
De esta forma, las autoridades han determinado que el asunto ha pasado a manos de la Policía de Niagara Falls “como una investigación de tránsito”.
Según fuentes policiales, los dos fallecidos era un matrimonio que cruzaba el puente fronterizo Rainbow, que conecta Estados Unidos y Canadá, en un vehículo de alta gama Bentley.
La pareja planeaba ir a un concierto de la banda de rock Kiss en Canadá, sin embargo, este fue cancelado, por lo que permanecieron en el área de las cataratas del Niágara.
Aún sin conocer el motivo, el vehículo alcanzó una gran velocidad, chocó con una acera y después con una barrera que lo propulsó en el aire hasta una garita antes de explotar.
Por: Redacción
Editor: Guillermo Leal