El diputado federal Ignacio Mier Velazco opinó que no se debieron hacer públicas las conversaciones entre la ministra Norma Piña y el senador Alejandro Armenta Mier, aunque dijo respetar el actuar del presidente de la Mesa Directiva.
“Yo creo que un valor que debe tener un político es no hacer públicas sus conversaciones privadas, porque son privadas. Yo respeto a quienes hacen eso, imagínense si yo como presidente de la Junta de Coordinación Política hiciera públicas las conversaciones, las diferencias que en lo privado tenemos o mantengo con otros personajes de la vida pública”, agregó en conferencia de prensa en la entidad poblana.
Mier Velazco consideró que las diferencias entre personajes públicos se tienen que hacer de frente, con argumentos, firmeza y respeto.
El coordinador de la fracción morenista en la Cámara de Diputados agregó que esto ocasiona que entre los personajes de la vida pública no quieran mandar mensajes por esta vía por el temor de ser expuestos.
“No quiero juzgarlo, simplemente que yo no comparto esto”, apuntó al ser cuestionado si era protagonismo del senador Armenta Mier.
Por otra parte, rechazó que él y el presidente de la Mesa Directiva del Senado utilicen su discurso contra la Suprema Corte de Justicia de la Nación como un ring político con miras a las elecciones de 2024 en la entidad poblana.
Niega lazos con Marín
En otro tema, el legislador federal poblano se deslindó de los mensajes que enviaron los abogados del ex gobernador Mario Marín a la prensa, al señalar que él fue uno de los más críticos del priísta y que sus diferencias eran públicas.
Aprovechó para decir que era tal el distanciamiento que no colaboró con él en la presidencia municipal de Puebla ni en su administración estatal.
En este sentido, también rechazó que su equipo haya filtrado los mensajes contra la periodista Lidia Cacho, como denunció la autora de Los Demonios del Edén en redes sociales, a quien expresó su respeto y su apoyo en el proceso legal que enfrenta contra el ex mandatario poblano por el delito de tortura.
Por: Guadalupe Juárez
Editor: Guillermo Leal

