El 86.5 por ciento de las víctimas de un delito en Puebla sí tuvieron un daño, pues el 56.3 por ciento sufrieron un daño económico, el 23.4 por ciento emocional o psicológico y el 6.8 por ciento físico o laboral.
Así lo indica la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (Envipe) 2024.
De acuerdo con la información publicada este día, la tasa de víctimas de delito por cada 100 mil habitantes creció 15.9 por ciento, ya que en 2023 fue de 25 mil 196 y en 2024 se elevó a 29 mil 209, aunque no fue de las más altas como Estado de México, Ciudad de México y Tlaxcala.
La Envipe indicó que en el 60.7 por ciento de los casos, las víctimas estaban presentes cuando se cometió el delito, por lo que el 78.4 por ciento de estos no se presentó una agresión física contra el 20.9 por ciento en el que sí existió una agresión.
El 80.2 por ciento de los delincuentes eran sólo hombres, en 5 por ciento sólo mujeres y 10.2 por ciento hombres y mujeres.
En 2023 el costo total a consecuencia de la inseguridad y el delito en hogares representa 17.5 mil millones de pesos, lo que equivale a 7 mil 578 por persona afectada por la inseguridad, la cifra más alta en los últimos ocho años.
El 66.8 por ciento del impacto económico a consecuencia del delito es por pérdidas económicas, el 26.7 por ciento en medidas preventivas y 6.7 por ciento por gastos a consecuencia de daños en la salud.
Para protegerse de la delincuencia, el 30.3 por ciento de las y los poblanos cambian o colocan cerraduras o candados, el 27.2 por ciento cambian puertas o ventanas, el 20.3 por ciento realizan acciones en conjunto con sus vecinos, el 17.4 por ciento colocar rejas o bardas, 6.8 por ciento comprar un perro guardián y 17.5 por ciento “otra medida”.
La cifra negra de delitos denunciados permaneció en 93 por ciento, a pesar de que el 11.4 por ciento de las personas denunciaron un delito, cuando en 2022 apenas era de 10.4 por ciento.
De los delitos denunciados, el 61.7 por ciento se abrió una carpeta de investigación y el 38.4 por ciento no.
De los que se abrió una carpeta de investigación, el 40.4 por ciento sigue en trámite, el 46.1 por ciento “nada”, sólo el 4.9 por ciento recuperó sus bienes, en 1 por ciento hubo reparación del daño, en 3 por ciento se puso el delincuente a disposición de un juez y 3.9 por ciento no sabe o no respondió.
En 2022 la cifra negra era de 93.2 por ciento, mientras que en 2021 era de 93.6 y en 2020 de 94.7 por ciento, por lo que va a la baja.
Editor: Renato León
