Carlos Robledo, abogado de la Fundación UDLAP, señaló que no habrá clases presenciales en la universidad en tanto no exista una orden judicial por la que se restituya a la administración de la rectora interina Cecilia Anaya Berríos y al patronato presidido por la familia Jenkins.
El litigante pidió a los alumnos no ingresar a la universidad, pues dijo que no es necesario violentar, ya que hay confianza en los recursos legales presentados para recuperar la universidad.
Y es que, explicó un juez federal dictó una orden de suspensión definitiva, que obliga a quienes tomaron el control de la UDLAP a restituirla, sin embargo el juez 24 desacató el cumplimiento de dicha resolución.
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Por ello, dijo que el caso ahora se encuentra en poder del juez 60 de la Ciudad de México quien tendrá que acatar la orden.
Asimismo, calificó como una simulación el exhorto emitido por una jueza local, pues considero que no tiene competencia para decidir ya que le precede un mandato federal.
“No puede haber dos resoluciones distintas, que esta desde julio pasado sin cumplir y una supuesta resolución de un juez local que no tiene competencia para decidir. Solamente puede ser restituida la universidad a quien el juez ordenó que se le restituyera, no hay más”, sentenció.
Por Alejandra Olivera
Editora: Brenda Balderas
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