La CURP biométrica es una nueva versión de la Clave Única de Registro de Población en México, que incorpora datos como huellas dactilares y fotografía del rostro, aunque no se descarta el escaneo del iris. Este cambio tiene como objetivo principal combatir el robo de identidad y mejorar la seguridad en la identificación de los ciudadanos.
El proyecto quedará a cargo del Registro Nacional de Población (Renapo), aunque esta institución no ha informado acerca de su obligatoriedad a nivel nacional; expertos esperan que sea a partir de enero de 2025 cuando se comience a implementar, aunque las autoridades no lo han confirmado.
La nueva CURP promete una identificación más precisa, ya que los datos biométricos son únicos para cada individuo. Esto no solo reduce el riesgo de suplantación, sino que también moderniza el sistema de registro nacional, alineándose con las tendencias digitales actuales
En septiembre de 2023 el Senado aprobó en comisiones una nueva Ley General de Población, que planteaba obtener una nueva CURP con fotografía y huellas dactilares, lo que la convertiría en una cédula de identificación, pero hasta el momento las reformas no han sido aprobadas, por lo que no son vigentes ni oficiales.
La CURP tiene un inicio programado en el estado de Veracruz, donde ya se están realizando trámites. La idea es que este sistema se extienda a nivel nacional, ofreciendo un método más seguro para la identificación de los habitantes.
Para obtener la CURP biométrica, los ciudadanos deberán acudir a las oficinas del Registro Civil donde se capturarán sus datos. Fuera de Veracruz no se ha detallado el proceso.
Los requisitos incluyen:
Identificación oficial (como el INE).
CURP actual.
Correo electrónico para notificaciones.
El proceso es gratuito y está diseñado para personas de todas las edades, aunque los menores deben ir acompañados por un adulto. Está planteado para que tome un tiempo aproximado de 20 minutos.
