Durante la madrugada de este lunes 25 de noviembre, la ciudad de Culiacán volvió a vivir hechos de violencia, los cuales no se han detenido en la región desde aproximadamente poco más de tres meses.
En esta ocasión, grupos de civiles armados destruyeron al menos 65 cámaras de videovigilancia del C4. Este ataque, que se prolongó por aproximadamente 20 minutos con disparos y detonaciones en diferentes sectores de la ciudad.
Los reportes iniciales comenzaron alrededor de la 1:30 de la madrugada, con una explosión controlada que se atribuyó a las fuerzas militares tras el hallazgo de explosivos en una camioneta baleada.
Esta situación desencadenó una serie de ataques armados que se extendieron por toda la ciudad, incluyendo zonas como el norte, centro y sur de Culiacán.
Alrededor de las 2:27 de la madrugada, se registraron disparos dirigidos específicamente a las cámaras del C4 en el bulevar Emiliano Zapata. Los ataques no solo afectaron a las cámaras de seguridad; también hubo enfrentamientos y disparos reportados en múltiples sectores, desde Villas del Río hasta el Hospital Civil.
La destrucción de las cámaras no solo afecta la seguridad pública, sino que también plantea interrogantes sobre la efectividad de las medidas de vigilancia en Culiacán. La situación ha llevado a un aumento en la presencia militar en la zona, mientras las autoridades intentan restablecer el orden y prevenir futuros incidentes violentos.