El presidente estatal del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Néstor Camarillo Medina, se deslindó del alcalde de Zapotitlán de Méndez, Emiliano Vázquez Bonilla, acusado por disparar a las instalaciones de una primaria mientras se encontraba en estado de ebriedad.
En entrevista este martes, el dirigente sentenció que “el PRI no es abogado de nadie”, por lo afirmó que dejarán en manos de la Fiscalía General del Estado (FGE) las investigaciones del caso para fincar o deslindar responsabilidades del presidente municipal.
Indicó que después de los hechos ocurridos el pasado 19 de enero, el área jurídica del tricolor se comunicó con el edil para que explicara lo sucedido, quien negó su responsabilidad y se dijo en disposición de colaborar con la FGE para aclarar el caso.
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De acuerdo con la versión del alcalde priísta, no se encontraba en su domicilio al momento de los hechos, por lo que no pudo haber disparado al aire ni dañar las instalaciones de la Escuela Primaria “Juan N. Méndez”, como lo señalaron pobladores del municipio.
Camarillo Medina reiteró que el tema debe ser investigado a fondo por las autoridades competentes, de modo que el Comité Directivo Estatal (CDE) del PRI no protegerá a Vázquez Bonilla si resulta responsable.
“Él podrá argumentar alguna cosa, los pobladores argumentarán también su versión y al final la Fiscalía será la encargada de investigar qué es lo que está sucediendo y deslindar responsabilidades”, comentó.
El diputado local refirió que la posible destitución del presidente municipal quedaría en manos del Congreso del Estado, por lo que la remoción temporal que fue aprobada por el Cabildo de Zapotitlán de Méndez carece de legalidad.
Por Vera Fernández
Editora: Brenda Balderas
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