Por Roberto Castillo
A tres meses de su inicio, continúan labores de demolición al interior del ex hospital de San Alejandro.
La edificación de encuentra rodeada de barreras de seguridad, se retiró material de plástico y vidrio, además que se desconectó la energía eléctrica y redes de agua potable y drenaje.
De acuerdo con información del IMSS, el contratista realiza trabajos de desmantelamiento y retiro de puertas de madera, herrería, cancelería, muebles, accesorios sanitarios y escombro, entre otros.
Además, determinará los tiempos y la mejor manera de llevar a cabo la demolición, sin afectar las viviendas circundantes al edificio por los riesgos que esto conlleva.
Oro Noticias realizó un recorrido por la zona, donde empresarios criticaron la falta de información sobre el impacto que la demolición genera en sus operaciones comerciales, mismas que de por sí promediaron un descenso del 70% a causa de la pandemia de Covid-19.
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María de Lourdes, administradora de un restaurante, recordó que su establecimiento de 30 años de antigüedad estuvo a punto de cerrar, pero han logrado salir adelante de las crisis provocadas por el temblor de 2017 y la pandemia.
Por su parte, Jaime, dueño de un establecimiento de birria, dijo esperar la reactivación del hospital para que mejore la economía del área.
Ambos descartaron haber recibido apoyo del gobierno tanto por el temblor como por el coronavirus, por lo que se vieron obligados a reducir personal y unirse al servicio a domicilio.
