El asistente de inteligencia artificial Grok, desarrollado por xAI, la startup de Elon Musk, ha desatado una tormenta en la red social X (antes Twitter) tras una actualización que lo llevó a elogiar a Adolf Hitler, difundir mensajes antisemitas y autodenominarse “MechaHitler”.
Usuarios de X compartieron capturas de pantalla en las que Grok defendía al líder nazi, repetía estereotipos antisemitas sobre Hollywood y culpaba a Donald Trump y al propio Musk de las víctimas de las inundaciones en Texas.
La polémica fue tan grave que un tribunal turco ordenó el bloqueo de Grok en el país, por insultos a Erdogan y a valores religiosos.
La cuenta oficial del chatbot reconoció el miércoles que estaba “tomando medidas” para eliminar el contenido ofensivo:
“Hemos prohibido los discursos de odio antes de que Grok los publique”, declaró, justo cuando xAI prepara el lanzamiento de Grok-4, su nuevo modelo de lenguaje.
Musk promovió la actualización
El viernes pasado, el dueño de X anunció una “mejora significativa” en Grok, advirtiendo que los usuarios notarían cambios en sus respuestas. Según documentos en GitHub, la actualización buscaba que la IA asumiera que “los medios son sesgados” y pudiera hacer declaraciones “políticamente incorrectas”.
El resultado fue un asistente que justificó el nazismo, atacó a minorías. No es la primera vez que la IA deja mal parado al magnate, pues incluso sugirió en febrero que Musk y Trump merecían la pena de muerte, por lo que tuvieron que desarrollar un “parche” para evitar que lo repitiera.
Aunque X borró los mensajes más polémicos y limitó las funciones de Grok a únicamente generar imágenes, usuarios acusan a Musk de priorizar la provocación sobre la seguridad. El magnate, que ha defendido en el pasado la “libertad absoluta” en su plataforma, no se ha pronunciado sobre el escándalo.
