Gergö Bese, un sacerdote húngaro cercano al primer ministro, Viktor Orbán y conocido por su postura crítica hacia la comunidad LGBTQ+, fue suspendido por la Iglesia Católica después de que se revelara su participación en orgías homosexuales, según informó el portal Népszava.
Este lunes, la Diócesis de Kalocsa-Kecskemét suspendió al párroco Bese por ordenes del Vaticano y abrió una investigación sobre “serias acusaciones” en su contra, reportó un medio húngaro local. Además, reveló que la decisión impuesta será la más severa aplicada en el país.
Anteriormente, Bese había declarado en diferentes ocasiones a los medios húngaros acerca de los “peligros de la propaganda LGBTQ+”, las cuales son apoyados por empresas gigantes como Google, Apple o Microsoft, bajo los argumentos de que “la familia tradicional se encontraba bajo ataque” por parte de los grupos liberales que promueven lo que él considera una “desviación de la normalidad”.
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Tras su suspensión el viernes, el eclesiástico húngaro eliminó sus perfiles en redes sociales y por medio de un comunicado reconoció haber cometido “un error” al asegurar que ha “pecado contra la Iglesia” y su comunidad.
Según medios locales, el cura no solo habría participado en las orgías, sino también las habría grabado y subido a plataformas de pornografía gay. Además, aseguraron que fuentes gubernamentales sugirieron que el antiguo párroco abandone durante un tiempo el país.
Desde que llegó al poder en 2010, el Gobierno de Orbán ha promovido leyes que socavan los derechos de la comunidad LGTBI, prohibiendo el registro legal del cambio de sexo y dificultando la adopción para parejas del mismo sexo.
En 2021, el Parlamento aprobó una ley que vincula la homosexualidad con la pedofilia y prohíbe hablar sobre la homosexualidad o cambio de sexo a menores de edad, ya sea en las escuelas o en los medios dedicados a este público
Por redacción
Editora: Diana González
