La justicia argentina ha procesado a cinco personas relacionadas con la muerte del cantante Liam Payne, exintegrante de One Direction, quien falleció el 16 de octubre tras caer desde el tercer piso de un hotel en Buenos Aires. Este evento llevó a una investigación exhaustiva sobre las circunstancias que rodearon su muerte.
Entre los procesados se encuentran Gilda N, la gerente del hotel, y Esteban N, un empleado del lugar, ambos acusados de homicidio involuntario. Asimismo, Roger N, un amigo cercano de Payne. Los otros dos acusados, Braian Ny Ezequiel N, son empleados del hotel y están imputados por suministro de estupefacientes al cantante.
La investigación reveló que durante las últimas 72 horas de vida de Payne hubo un suministro significativo de drogas en el hotel. Los análisis toxicológicos confirmaron la presencia de alcohol, cocaína y un antidepresivo en su organismo. La autopsia determinó que la causa de muerte fueron politraumatismos y hemorragias internas y externas resultantes de la caída.
Dos de los acusados han sido enviados a prisión preventiva, mientras que se han dictado embargos contra los imputados. Las autoridades continúan investigando los detalles del caso, que ha conmocionado a sus seguidores.
Dentro de la investigación, se analizaron más de 800 horas de grabaciones de cámaras de seguridad del hotel y otros lugares que Payne visitó durante su estadía en Buenos Aires, lo que permitió reconstruir sus movimientos y las interacciones con los acusados. En la habitación donde se hospedó encontraron restos de drogas y objetos que habían sido destruidos.
Los dispositivos electrónicos del cantante fallecido fueron examinados para obtener información adicional sobre las comunicaciones previas a su muerte, además, los investigadores recopilaron testimonios que confirmaron que dos empleados del hotel proporcionaron drogas a Payne en al menos cuatro ocasiones durante su estancia, específicamente entre el 13 y el 16 de octubre.