La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, confirmó la decisión de la compañía española dedicada a la producción y comercialización de energía Iberdrola de abandonar el país; no obstante, agregó que dicha resolución no obedece a problemas con la situación jurídica del país, como afirmaban medios españoles, sino a una decisión de carácter empresarial.
Este viernes 1 de agosto, en la Mañanera del Pueblo, la titular del Poder Ejecutivo en México aclaró que Iberdrola dejará el país debido a que será comprada por la empresa española dedicada a la gestión de agua y energía Cox, pues la primera buscará enfocar gran parte de sus inversiones a Europa, tras ganar un concurso.
“Entonces es una decisión entre las dos empresas, y pues tiene que venir todo el procedimiento jurídico, el pago de impuestos, todo lo que tiene que haber por parte de Iberdrola, pero no fue una decisión relacionada con algún problema que tuvieran con México, sino una decisión empresarial”, aseveró la mandataria a medios de comunicación.
Hasta donde se sabe, Cox adquirió la filial de Iberdrola México por un monto total de 4 mil 200 millones de dólares. Dicha compra incluye 15 centrales con capacidad operativa de 2.600 megavatios (MW) que corresponden a ciclo combinado, cogeneración, solar y eólica; una cartera de proyectos renovables valuada en 12 gigavatios (GW); así como la deuda y participación de accionistas minoritarios.
La mandataria declaró que este suceso, lejos de representar temor de las empresas transnacionales para invertir en México, representa confianza por parte de los inversionistas, pues detrás del interés de Cox por tener presencia en México hay inversión europea y estadounidense.
Editor: Jesús Israel Villalobos Fernández
