Este 9 de octubre se cumple un mes de la ola de violencia que mantiene paralizados a los habitantes de Culiacán, Sinaloa, por la confrontación entre las facciones de “La Mayiza” y “Los Chapitos” provocada por la detención de Ismael “El Mayo” Zambada.
La guerra de carteles ha provocado que la sociedad haya autoimpuesto un toque de queda y deje de asistir a comercios como restaurantes y plazas. La actividad comercial suspende sus actividades a partir de las 19:00 horas.
Tras 30 días de conflicto en Culiacán, suman 192 asesinatos, es decir, un promedio de seis homicidios por día; 224 personas desaparecidas, en promedio siete secuestros cada 24 horas.
Asimismo, se ha registrado el desplazamiento de por lo menos 200 familias de Culiacán y la zona conurbada, informó el Consejo Estatal de Seguridad Pública del Estado de Sinaloa.
“Ellos sabrán qué hacer en términos de seguridad, nosotros no somos especialistas, no alcanzamos a entender ni tenemos toda esa información, pero sí tenemos la económica y sí podemos decirles que si no recibimos un apoyo sustancial para mover esta estructura económica, eso va a empezar a colapsar y a generar hambre y otro nivel de violencia social”, comentó Laura Guzmán, presidenta de la Cámara de la Industria Restaurantera en Culiacán.
El gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, ha mostrado disposición dialogar con los diversos sectores sociales, debe ser más claro y contundente en las acciones para recuperar la estabilidad en la entidad y lleve hasta la máxima instancia de gobierno que es la presidencia sus peticiones y sea más oportuno en transmitir información a la sociedad sobre los operativos que se llevan a cabo por las autoridades.
El 65% de la economía que sostiene la capital está en el comercio informal y es el más afectado. Sobre los establecimientos registrados, informaron que mil 500 han tenido que recortar horarios; más de 200 negocios han tenido que cerrar, lo que ha provocado que cerca de mil 200 empleos se hayan perdido.
Por: Redacción
Editor: Raúl Velázquez Márquez
