Reducir la jornada laboral semanal de 48 a 40 horas podría incrementar el costo de producción de la tortilla entre 2.3 y 4.6 pesos por kilo, según las estimaciones del Consejo Nacional de la Tortilla (CNT).
Además, solicitó al gobierno subsidiar este aumento para evitar que se traslade al consumidor final y afecte la economía. El CNT enfatizó que antes de implementar esta reforma laboral se requiere un análisis exhaustivo para evitar impactos negativos en la economía nacional, ya que la reducción de horas implica mayores costos productivos que podrían reflejarse en precios más altos para los consumidores.
Actualmente, el precio promedio del kilo de tortilla en tortillerías es de 21.6 pesos y en tiendas de autoservicio de 14.1 pesos, según datos de Grupo Consultor de Mercados Agrícolas y la Procuraduría Federal del Consumidor. El CNT reiteró la necesidad de mecanismos de compensación para que el incremento en costos no afecte productos de alta demanda y valor social como la tortilla.
En paralelo, el gobierno mexicano ha anunciado que la reducción de la jornada laboral a 40 horas se implementará de forma gradual hasta 2030, con foros de diálogo entre trabajadores, empresarios y sindicatos para consensuar la mejor forma de llevar a cabo esta transición, buscando mejorar la calidad de vida de los trabajadores sin afectar salarios ni derechos adquiridos.
Sin embargo, sectores empresariales aseguran que otorgar mejores derechos a los trabajadores podría elevar los costos laborales.
