Al menos 59 jóvenes perdieron la vida el pasado domingo 16 de marzo, al quedar atrapados durante un incendio al interior de una discoteca en Macedonia del Norte.
De acuerdo con las autoridades locales, la discoteca no tenía rociadores contraincendios, sólo disponía de dos extintores y la única salida, aparte de la puerta principal, estaba cerrada.
“El edificio no disponía de ningún sistema de bocas de incendios ni de hidrantes, sólo tenía dos extintores y un número inadecuado de salidas, con una única puerta trasera improvisada, además de la entrada principal, que estaba cerrada con candado y no tenía tirador desde el interior”, detalló el fiscal general, Ljupcho Kocevski.
Además, el local estaba insonorizado con materiales altamente inflamables y se usaron dispositivos pirotécnicos durante el concierto que se estaba celebrando cuando comenzó el fuego.
Según la información preliminar, fue precisamente el uso de pirotecnia lo que desencadenó el incendio sobre las 3:00 de la madrugada, cuando había unas 500 personas, el doble del aforo permitido.
Según informó a los medios locales la directora del hospital de Kochani, la víctima más joven tenía 14 años y el resto de los fallecidos son en su mayoría personas de hasta 25 años.
Hoy han comenzado los interrogatorios en el Tribunal Penal de Skopie, dentro de la investigación abierta sobre la sospecha de que la licencia de funcionamiento de la discoteca en la localidad de Kocani, había sido falsificada.
Entre los llamados a declarar está el exministro de Economía, Kreshnik Bekteshi, ya que durante su mandato el club recibió la licencia de funcionamiento.
Al menos 44 de los 155 heridos han sido hospitalizados en el extranjero, debido a la escasez de camas en unidades de quemados, mientras que el país inicia este lunes un luto de siete días de luto por la tragedia que ha dejado 59 fallecidos.
Los pacientes han sido trasladados a Serbia, Bulgaria, Turquía y Grecia, y otros 22 serán enviados hoy a Croacia, Rumanía, Hungría y Austria, informaron las autoridades sanitarias.
También han llegado a Macedonia del Norte equipos médicos desde Serbia, República Checa, Bélgica e Israel, para ayudar a atender a los heridos.