El líder supremo de Irán, Ali Jameneí, mencionó que el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, debería ser condenado a muerte, argumentando que la reciente orden de detención emitida por la Corte Penal Internacional (CPI) no es suficiente.
En un encuentro con miembros de la milicia basiji en Teherán, Jameneí afirmó: “Es necesario emitir una sentencia de muerte para Netanyahu y los líderes criminales de este régimen (Israel)”.
Además, el líder iraní reiteró las acusaciones contra Israel por los crímenes de guerra cometidos en Gaza y Líbano, señalando los ataques a civiles. Aseguró que su enemigo no ha logrado triunfar en el conflicto contra sus aliados en la región, como Hamás y Hezbolá, afirmando: “El bombardeo de casas de civiles no es una victoria. El enemigo no ha ganado en Gaza ni en Líbano, ni ganará”.
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La CPI había emitido órdenes de arresto contra Netanyahu y su exministro de Defensa, Yoav Gallant, por crímenes de guerra y lesa humanidad en Gaza. Esta decisión fue recibida con celebración por parte de las autoridades iraníes, quienes consideran que el veredicto es un triunfo para los pueblos palestino y libanés.
Es importante señalar que la CPI carece de una fuerza policial para ejecutar arrestos; sin embargo, los 125 estados miembros del tribunal están obligados a cooperar. Ni Estados Unidos ni Israel son parte de esta corte.