El gobernador Alejandro Armenta Mier sostuvo que la ampliación del programa de fotomultas no tiene un fin recaudatorio, si no la seguridad de los ciudadanos, además dijo que son necesarias leyes rígidas y no laxas.
En entrevista, el mandatario sostuvo que su administración no tiene como fin último la recaudación y muestra de ello es el Programa de Modernización del Transporte Público con el que el Estado dejó de recibir más de 100 millones de pesos por diversas condonaciones.
Por ello, dijo que es necesario que se realicen las modificaciones para garantizar que todos circulan en el estado con las medidas preventivas de seguridad básicas, a través de leyes rígidas y no laxas, pues éstas últimas son más fáciles de violentar.
Indicó que si se violenta la reglamentación, en este caso el exceso de velocidad y las fotomultas, los ciudadanos ponen en riesgo su vida y la de otras personas.
“Toda disposición legal cuando es laxa normalmente se violenta (…) cuando una ley es rígida es mucho más respetable, entonces tenemos que lograr que el orden y el respeto a la convivencia entre la población”, apuntó
Consideró que si hay una buena comunicación de sobre las disposiciones jurídicas, la población va a respetar y permitirá mayor armonía, así como la disminución de accidentes viales.
Harán estudio estadístico
Al respecto, la secretaria de Movilidad y Transporte estatal, Silvia Tanús Osorio, dejó en claro que 10 nuevos dispositivos servirán para supervisar las conductas de automovilistas, como parte de un estudio estadístico para ver cuántos y qué actividades realizan que podrían ser motivo de un accidente.
Sin embargo, mencionó que lo observado por dichas cámaras no se infraccionará, aunque en un futuro los agentes de Proximidad Vial podrán sancionar las irregularidades qué detecten.
“Son 10 cámaras que se utilizarán eminentemente con fines estadísticos para ir conociendo cuáles son los hábitos de los poblanos. Nos van a reportar quién no cumpla con el cinturón de seguridad”, mencionó.