La NASA anunció que una muestra de material traída a la Tierra desde el asteroide Bennu, que tiene unos 4 mil 500 millones de años de antigüedad, contiene moléculas de agua y un alto contenido de carbono.
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La misión Osiris-Rex recolectó estos materiales de Bennu y los trajo de regreso a nuestro planeta el 24 de septiembre.
De acuerdo con el director de la NASA, Bill Nelson, se trata de la muestra más grande de un asteroide rico en carbono jamás traída a la Tierra y será valiosa para la investigación sobre los orígenes de la vida en el planeta.
La misión Osiris-Rex es un hito importante en la exploración espacial, ya que es la primera vez que la NASA trae muestras de un asteroide a la Tierra, hoy logrado con los 250 gramos de material extraído de Bennu.
Este logro proporcionará información valiosa sobre los asteroides presentes en el espacio en la actualidad y el pasado, además de ofrecer la posibilidad de estudiar la historia de nuestro sistema solar.
Los expertos de la NASA en el Centro Espacial Johnson en Texas han estado llevando a cabo una labor minuciosa de separación y examinación de los fragmentos de material rocoso.
Este proceso implica diversas técnicas, como imágenes por escaneo con microscopio de electrones, mediciones con luz infrarroja, difracción con rayos X y análisis de elementos químicos.
Cada una de estas técnicas se utiliza para examinar y caracterizar los materiales de manera detallada, lo que permite obtener información valiosa sobre la composición y las propiedades de las muestras.
Por Redacción
Editor: Carlos Jurado
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